OLIVERA: “EL GOBIERNO DE INSFRAN QUIERE DE RODILLAS AL SECTOR PRIVADO”




“Justo en este momento existe un estado de gran incertidumbre, mezclado con bronca y frustración por el repentino cambio del protocolo de ingreso de camiones a la provincia; hay decenas de camiones varados en los accesos al territorio trayendo carne y otros productos para abastecer a los supermercados, pero le impiden el tránsito”, comentó.
“Al mismo tiempo, se convoca a reuniones con sectores sindicales y empresariales para afianzar medidas preventivas en lo sanitario, pero estoy recibiendo varias llamadas de empresarios y comerciantes que me informan que no fueron invitados, y que, sólo los eternos amigos del poder tomaran parte de esos encuentros”, agregó.
“¿Alguien puede creer en la nueva normalidad?”, interrogó con vehemencia, en irónica respuesta a la frase oficial usada para identificar a la post pandemia local.
“Es una falacia que se diga que la extensión de la cuarentena responde a un criterio de protección sanitaria. El gobernador y su modelo, claramente, tienen como enemigos al privado”, advirtiò el legislador opositor.
“La pandemia le vino como anillo al dedo al gobernador para robustecer su administración conservadora y antidemocrática; al que piensa por sí mismo, se desarrolla sin acudir al Estado es visto como enemigo por el Gobierno provincial”, dijo
“Con un poco más de 80 días de encierro y el virus controlado, es tiempo de movilizar a la economía y a sus actores, pero con otro ritmo, con otra impronta, con un claro estimulo que debiera venir de lo más alto. Están asesinando a las pocas Pymes que existen en Formosa; quienes se inclinaron por hacer pequeñas inversiones a partir del esfuerzo familiar y de alguna formación universitaria están viviendo una verdadera pesadilla, llena de bronca y frustración”, recriminó.
“Lo que ocurre en otras jurisdicciones es una clara muestra de lo que Formosa debería hacer; acá no se hizo nada de nada para apoyar y proteger al privado, que es el segundo empleador más importante; el gobierno se sentó a disfrutar el desplome del empresario, como si se tratara de un enemigo”, comparó.
“Esta enorme ausencia de coherencia tiene que ver con el exceso de poder; esta gente se maneja como propietaria del Estado, y cree que puede decidir la vida y muerte del vecino”, acusó Olivera.
“No soy alguien que comulgue mucho con el intendente municipal, pero lo que venía haciendo el Municipio en materia de entretenimiento, de cultura y deporte, con un puñado de pequeñas obras y actividades en la zona portuaria, dando trabajo y dinero a cientos de formoseños quedó pulverizado por esta postura egoísta y arcaica de las autoridades provinciales; pero lo peor fue que jamás ideo una respuesta para atender todo el vacío que generó, bajo el manto de la pandemia, un vergonzoso engaño”, añadió.
“Es momento de que nos unamos todos los formoseños, para, juntos, salir de esto, en paz, pero con energía, postulando los cambios verdaderos y responsables ante la pandemia, para evitar una completa estatización, y, con ella, la completa dependencia de unos pocos que hace más de 25 años gobiernan sólo para sus propios intereses”, postuló.