LA SOLEDAD DEL PRODUCTOR FORMOSEÑO




La mortandad de reses por inanición, y el freno a la siembra, constituyen las dos partes de un escenario que se generaliza, y parece no tener un fin en el corto plazo.
Mientras los agricultores no reciben respuestas del Gobierno provincial en una penosa búsqueda de apoyo para volver a sembrar, muchos ganaderos se aferran a sus animales que, en muchísimos casos, deambulan perdidos en los amarillentos campos formoseños.
En la imagen que acompaña este texto, un ganadero de la zona de Riacho He He, trata de salvarle la vida a una vaca aplicándole suero, tras encontrarla empantanada en una zanja que, hasta pocas horas antes, conservaba algo del agua que el animal buscaba con desesperación.
Cientos de vacunos ya perdieron la vida en Formosa por efectos de la sequía y de algunos incendios intencionales.