Fue en su propio domicilio de José María Uriburu y Fontana, donde funcionaba su reconocida escribanía. Fue gobernador de Formosa entre 1981 y 1982, durante el Proceso de Reorganización Nacional, pero además tuvo una destacada trayectoria política siempre en defensa de los ideales desarrollistas, y siempre gozó de un altísimo prestigio por sus valores humanos y sociales que supo trasladar en una familia compuesta con varios hijos muy reconocidos y destacados en la sociedad formoseña. En los últimos años se retiró de la mayoría de sus actividades sociales y laborales, y se recluyó en su domicilio donde la muerte lo convocó este sábado durante la siesta.