Alberto Fernández y Cristina Fernández, podrían formar parte mañana, cerca de la medianoche, de un gigantesco festejo que organiza el gobernador Gildo Insfran para celebrar lo que viene adelantando hace varias semanas como una nueva y contundente victoria electoral en la provincia de Formosa, el peronismo.
La presencia de las principales autoridades nacionales tiene el propósito de relativizar lo que muchos consideran un fuerte revés en los comicios legislativos de este domingo, en gran parte del país, incluyendo la clave jurisdicción bonaerense.
La versión circula entre dirigentes y funcionarios nacionales y locales, a través de grupos cerrados de Whatsapp, pero nadie la confirmó formalmente.
En las PASO, el oficialismo provincial cayó por poco menos de un millar de votos ante una oposición separada, pero la campaña política que hizo en busca de rever lo ocurrido en septiembre, lanzando varios millones de pesos a las calles y a los barrios, puede interferir en los planes de sus adversarios.
Discursos duros, apoyados en las brutales restricciones durante la pandemia, el reconocido sesgo autoritario del gobernador Insfran, y la falta de oportunidades laborales pese a su riqueza natural, constituyeron la matriz del mensaje opositor que se muestra sumamente confiado en un triunfo electoral.